Esta obra captura la adrenalina pura del trabajo rural. El instante exacto de la paleteada, donde dos jinetes coordinan sus fuerzas y las de sus caballos para dominar al animal.
Se destaca la tensión en el movimiento: A través de pinceladas enérgicas y una rica textura al óleo, la pieza transmite la polvareda, el ruido y la destreza típica de nuestras tradiciones. No es solo un paisaje, es una escena de oficio y coraje.
Para quienes valoran la cultura ecuestre y buscan una obra que transmita la vitalidad y el esfuerzo del campo argentino.